La Caseta Del Priorat
Servicios principales
- 120 m²
- 1 dormitorio
- 1 cuarto de baño
- 5 huéspedes
- 2 camas
Ubicación
La Caseta Del Priorat Apartamento Porrera está a una distancia de 4 km de la Iglesia de Sant Jaume. Ofrece un balcón y una zona de comedor con vistas a la calle. Los huéspedes pueden hacer uso del Wi-Fi y el aparcamiento privado en las instalaciones.
Este apartamento de 120 m² se sitúa a unos 5 minutos a pie del centro de Porrera. La Serra del Mollo está a una distancia de 4 km de este apartamento, mientras que Oropesa del Mar está a 137 km.
Los huéspedes se beneficiarán de la chimenea de piedra y las ventanas insonorizadas y podrán relajarse con internet de alta velocidad y TV con múltiples canales. Las habitaciones están equipadas con detectores de humo. Este alojamiento dispone de 1 dormitorio con almohadas no alergénicas. Los 1 cuarto de baño disponen de inodoro y una ducha, así como secadores de pelo y albornoces.
Los huéspedes pueden disfrutar de cafetera, nevera y utensilios de cocina, y una cocina completa equipada con servicio de tetera/cafetera. El aeropuerto más cercano es el aeropuerto Reus, a 35 km del La Caseta Del Priorat Apartamento. Para los amantes del deporte, ofrece actividades como senderismo.
Reseña de un crítico de hotel
Recientemente tuve el placer de alojarme en La Caseta del Priorat, situado en el encantador pueblo de Porrera, y debo decir que fue una experiencia maravillosa. La casa, que cuenta con una decoración romántica y toques modernos, nos recibió cálidamente, con la calefacción ya funcionando, perfecto para combatir el frío de una noche de viernes. Además, Oriol, nuestro anfitrión, fue excepcionalmente atento, dándonos toda la información necesaria y preparándonos un estupendo desayuno con productos locales que realmente me hicieron recordar los sabores de mi Andalucía. El apartamento es genial, tiene una cocina equipada que disfrutamos mucho, perfectas para preparar algún plato con los ingredientes frescos que compramos en la panadería artesanal del pueblo. Lo mejor fue la cata de vinos que Oriol nos ofreció, como un extra. Nos llevó a sus viñedos, donde no solo degustamos vinos excepcionales, sino que también escuchamos las historias fascinantes del lugar. Sin duda, un destino que combina hospitalidad y gastronomía de forma magistral. ¡Repetiría sin dudarlo!
